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Venezuela calificó este viernes (7) de “robo flagrante” la confiscación de un segundo avión en República Dominicana por parte de Estados Unidos, al tiempo que calificó de “ladrón de aviones” al jefe de la diplomacia estadounidense, Marco Rubio, un acérrimo crítico del presidente izquierdista Nicolás Maduro.

“La República Bolivariana de Venezuela denuncia ante el mundo el flagrante robo de una aeronave propiedad de la nación venezolana, realizado por órdenes del Secretario de Estado de los Estados Unidos, Marco Rubio”, indicó el Ministerio de Relaciones Exteriores de Venezuela en un comunicado.

“Marco Rubio, de sembrador de odio a ladrón de aviones”, añade el texto.

Venezuela también aseguró que “tomará todas las medidas necesarias para denunciar este robo y exigir la devolución inmediata de sus aeronaves”.

Se trata del segundo avión confiscado por Estados Unidos a Venezuela en menos de un año, pero el primer gesto de mano dura del gobierno de Donald Trump, quien en su primer mandato impuso una batería de sanciones contra Venezuela, incluido un embargo petrolero, en un intento de derrocar a Maduro.

Confiscación de un segundo avión

En presencia de Rubio, un fiscal dominicano y un representante de la policía estadounidense colocaron un cartel de «incautado» en un avión Dassault Falcon 200 con bandera venezolana en una pista militar de Santo Domingo.

“La incautación de esta aeronave venezolana, utilizada para evadir las sanciones estadounidenses y los controles (de lavado de dinero), es un poderoso ejemplo de nuestra determinación de exigir cuentas al régimen ilegítimo de Maduro por sus acciones ilegales”, dijo Rubio en X, al final de su primera gira por cinco naciones latinoamericanas como secretario de Estado.

Según el Departamento de Estado, las autoridades venezolanas utilizaron la aeronave para volar a Grecia, Turquía, Rusia, Nicaragua y Cuba, y la llevaron a República Dominicana para mantenimiento.

En septiembre de 2024, durante la administración del expresidente Joe Biden, otra aeronave oficial venezolana, modelo Dassault Falcon 900EX, fue confiscada en República Dominicana y trasladada al estado de Florida. Las autoridades estadounidenses afirmaron que el objeto había sido comprado “ilegalmente” por 13 millones de dólares a través de una empresa fantasma.

En junio de 2022, un Boeing 747 venezolano-iraní quedó en tierra en Argentina y destruido en Estados Unidos en enero de 2024, un hecho que Caracas también calificó como un “robo”.