Tegucigalpa. El convenio firmado entre Honduras y Cuba para traer más de un centenar de médicos especialistas al país representa un gasto de 159.6 millones de lempiras, según confirmó la Secretaría de Finanzas.

En respuesta a una solicitud de información de ICN Investiga, la institución detalló las transferencias registradas a Planificación por medio del sistema SIAFI para el financiamiento del Acuerdo Tripartito de Cooperación, con vigencia de dos años y suscrito entre ambas naciones.

Esta respuesta permitió conocer los montos ejecutados y la ruta presupuestaria utilizada para financiar el hermético convenio

De acuerdo con la documentación oficial, la Secretaría de Planificación Estratégica —encargada de financiar la brigada desde su propia partida— ejecutó 75.8 millones de lempiras en 2024, primer año del acuerdo, mientras que entre enero y septiembre de 2025 se han erogado 69.8 millones de los 83.8 millones presupuestados.

Así, de los 159.6 millones presupuestados, Planificación ha pagado 145 millones, o sea un 91 por ciento. El dinero provino tanto del Tesoro Nacional como de donaciones internas.

El convenio fue suscrito el 1 de febrero de 2024 en Tegucigalpa por la ministra de Salud, Karla Paredes, el ministro de Planificación, Ricardo Salgado, y el embajador de Cuba, Juan Roberto Loforte. Tiene una duración de dos años, por lo que se extenderá hasta de febrero de 2026.

Según lo pactado, 89 médicos cubanos —entre cirujanos, ortopedistas, oncólogos, internistas, psiquiatras, epidemiólogos y geriatras—, que arribaron el 20 de febrero, fueron contratados por la Secretaría de Planificación Estratégica y asignados principalmente a los hospitales Escuela y San Felipe, en Tegucigalpa, así como en el Mario Catarino Rivas, en San Pedro Sula.

No obstante, medios gubernamentales cifran la cantidad de galenos en 120.

El costo total de la brigada, dividido entre los 120 profesionales y la vigencia del convenio en 2024 y 2025 implica que cada médico cuesta al Estado unos 60,000 lempiras mensuales.

Sin embargo, hasta ahora el gobierno no ha aclarado cuánto de presupuesto se destina a salario de los galenos ni otros beneficios.

Medios de comunicación, como El Heraldo, reportaron que, de acuerdo con sus fuentes, el salario por facultativo es de 1,000 dólares, o sea unos 25 mil lempiras.

La Secretaría de Planificación Estratégica ha insistido en que no costea directamente los salarios de los médicos cubanos.

En el Portal de Transparencia de la institución, dentro del apartado de remuneraciones mensuales de empleados, no aparece registrada ninguna planilla vinculada a galenos especializados.

Lo único que figura en los reportes oficiales son transferencias ejecutadas a través de la unidad ejecutora 005, denominada Cooperación Médica Cubana, un rubro interno de Planificación creada para ese fin.

Según esos documentos internos de Planificación, esta dependencia transfirió 14.2 millones de lempiras en abril de 2024 y 13 millones en diciembre del mismo año, ambos montos con destino a la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI), entidad que parece funcionar como intermediaria en el acuerdo. Esas son las únicas dos transferencias registradas en los reportes revisados.

La OEI suele operar en muchos países de la región como ente cooperante o intermediario administrativo en convenios financiados con recursos públicos. Su papel es recibir los fondos asignados por el Estado y ejecutar pagos, contrataciones o adquisiciones vinculadas a proyectos específicos.

La ministra de Salud de Honduras, Karla Paredes, en el momento de firmar el convenio, no precisó el monto exacto del salario para los médicos cubanos, pero sí señaló que ese pago sería inferior al que perciben los médicos hondureños.

Después un ajuste aplicado este año en el sector público, los médicos generales reciben un salario de unos 36 mil lempiras y los especialistas perciben alrededor de 44 mil, como ingreso base.

Para esclarecer el valor del estipendio que perciben los sanitarios extranjeros, ICN Investiga hizo una solicitud de información a la Secretaría de Finanzas para que detallara el costo de las transferencias hechas a la Secretaría de Planificación para pago de ese renglón.

No obstante, Finanzas indicó que no le corresponde informar sobre los salarios individuales de los médicos cubanos, pues esa responsabilidad recae en las instituciones ejecutoras del convenio.

 “Dado que dicho convenio fue suscrito por la Secretaría de Planificación Estratégica y la Secretaría de Salud de Honduras en calidad de entidades responsables de la ejecución técnica y administrativa del acuerdo, corresponde a estas instituciones la gestión y carga de las planillas de sueldos y salarios en el sistema, así como la oficialización de la información requerida para la transferencia solicitada”, reza el memorándum DT-OIP-389-09-2025.

ICN Investiga también solicitó a la Secretaría de Planificación, mediante petición de acceso a la información pública, copia de los contratos laborales de los médicos cubanos; no obstante, hasta el momento de la publicación de este reportaje, la institución no había respondido.

De acuerdo con reportes oficiales, la brigada ha realizado:

  • 41,200 consultas
  • 11,450 cirugías
  • 39,000 consultas de oftalmología
  • 5,800 cirugías de catarata

Como contraprestación, el convenio establece que médicos hondureños viajarán a Cuba a capacitarse en alguna especialidad.

Ilegales

El Colegio Médico de Honduras (CMH) ha cuestionado el acuerdo con Cuba porque, a su juicio, se violentaron los procesos de acreditación profesional que deben cumplirse ante esa organización.

En lugar de presentar la documentación que respaldara sus títulos y especialidades ante el CMH, como lo ordena su ley orgánica, los médicos extranjeros únicamente enviaron listados con nombres, sin anexar certificados.

El presidente del CMH, Samuel Santos, explicó que esa omisión incumple los requisitos que exige tanto la legislación nacional como el propio gremio para autorizar el ejercicio médico en el país.

A ello se suma que la normativa limita la permanencia de brigadas extranjeras a un máximo de tres meses, mientras que la cubana se mantiene en Honduras de manera indefinida.

Por estos motivos, la organización interpuso una denuncia ante el Ministerio Público, al considerar que la presencia de las brigadas médicas cubanas en el país se autorizó sin cumplir con las formalidades establecidas y sin la documentación que respalde la idoneidad de los profesionales

Además de estas irregularidades, la organización ha reprochado que no se priorice la contratación de médicos hondureños que continúan subempleados o en espera de plazas en el sistema sanitario. Según sus propios registros, más de 10 mil médicos permanecen desempleados en el país.

La Secretaría de Salud, por su parte, ha defendido el convenio señalando que la brigada está integrada por especialistas en distintas ramas de la medicina que vendrían a cubrir áreas donde existe déficit en la red hospitalaria nacional.

Las brigadas médicas cubanas han sido objeto de fuertes cuestionamientos internacionales por las condiciones en las que operan.

Diversos informes señalan que los profesionales son sometidos a normas restrictivas, limitaciones de movilidad y sanciones si deciden abandonar las misiones.

Además, carecen de acceso pleno a sus contratos y muchas veces desconocen los términos financieros bajo los cuales son enviados al extranjero.

Estas prácticas han llevado a organismos como Human Rights Watch y Prisoners Defenders a calificarlas como una forma de esclavitud moderna, al considerar que los médicos son forzados a trabajar en condiciones coercitivas y sin libertad plena.

El Parlamento Europeo también condenó este modelo en resoluciones oficiales, mientras que el Departamento de Estado de Estados Unidos lo ha descrito como un esquema de “trata de personas” administrado por el Estado cubano.

El tema salarial es uno de los puntos más sensibles. Distintos reportes documentan que los médicos reciben únicamente una fracción del salario que pagan los países receptores, mientras la mayor parte queda en manos del gobierno de La Habana.

En algunos casos, el ingreso disponible para los galenos ha sido inferior al 25 % del monto total. Testimonios de médicos exiliados confirman que, en varias misiones, el pago neto no supera una mínima parte de lo que oficialmente se desembolsa.

Estados Unidos, por medio del secretario de Estado Marco Rubio, ha declarado que impondrá restricciones de visa o revocaciones de estas a funcionarios que colaboren con el régimen cubano en el programa de misiones médicas, bajo el argumento de que esas misiones constituyen un esquema de trabajo forzado.

Por ejemplo, el Departamento de Estado anunció que ya ha revocado las visas de funcionarios brasileños vinculados al programa Más Médicos, acusados de facilitar la exportación coercitiva de mano de obra médica cubana.