El nuevo salario mínimo de 500.000 pesos (cerca de 530 dólares/490 euros al cambio de hoy) entró en vigor este lunes en Chile, con el compromiso del Gobierno del progresista Gabriel Boric de iniciar una nueva negociación el año que viene.

«Cuando llegamos al Gobierno en 2022, el sueldo mínimo era de 350.000 pesos y, en un poquito más de dos años, hemos concretado un alza histórica de 150.000 pesos, que es la más significativa en el último tiempo», indicó el mandatario en un acto oficial en Santiago.

¿A quiénes beneficia el aumento?

El alza del salario mínimo hasta los 500.000 pesos -que afecta a 800.000 personas- fue una de las principales promesas de campaña de Boric y fue alcanzado de manera gradual, en distintos tramos desde 2022.

La subida, indicó el gobernante, se acordó con sindicatos y gremios empresariales y fue aprobada en el Parlamento con los votos de la oposición de derecha y junto a un paquete de ayudas para que las pymes pudieran cumplir con el pago del nuevo salario mínimo.

«Hemos cumplido con nuestra palabra y lo hicimos antes de lo inicialmente prometido», añadió Boric.

Chile entre los países que mejor paga a sus obreros

Chile tiene uno de los salarios mínimos más altos de Latinoamérica, aunque todavía está muy lejos de los principales países miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).

La ministra chilena del Trabajo, Jeannette Jara, anunció a finales de mayo que el Gobierno iniciará a partir de marzo de 2025 una nueva negociación sobre el salario mínimo, que los sindicatos aspiran a elevar a los 630.000 pesos (667 dólares/620 euros) al final del mandato, en marzo de 2026.