Tegucigalpa, Honduras.- La candidata presidencial de Libre, Rixi Moncada, cuestionó abiertamente la convocatoria hecha por las iglesias para la caminata nacional del 16 de agosto, al considerar que se trata de una maniobra política disfrazada de acto espiritual que busca frenar el proceso de refundación impulsado por su partido.

En una publicación difundida en sus redes sociales, Moncada aseguró que “no cabe duda” de que las cúpulas religiosas están prestándose a una injerencia política para beneficiar a los partidos tradicionales y empresarios evasores, así como para encubrir a líderes religiosos que —según ella— guardaron silencio ante crímenes de lesa humanidad y fraudes electorales pasados.

La candidata aseguró que no se dejará detener por quienes, afirma, se oponen al cambio. “Me mueve mi amor sincero por el pueblo”, escribió, reafirmando su fe en Dios y su compromiso con seguir asistiendo a las iglesias.

Estas declaraciones se suman a la tensión entre el oficialismo y las organizaciones religiosas, luego de que pastores y sacerdotes exigieran respeto a la neutralidad de los templos y denunciaran actos proselitistas dentro de sus espacios. La confrontación continúa escalando a medida que se aproxima la fecha de la caminata y el ambiente electoral se polariza aún más.