Tegucigalpa.- Este lunes volvió a operar el punto de taxis de la colonia Kennedy hacia la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH).

Por una semana los conductores paralizaron las unidades, la acción de los ruleteros debido a la creciente amenaza de extorsión que enfrentan los conductores.

Sin embargo, durante el fin de semana lograron negociar con los extorsionadores para poder operar y sin que maten a otro de sus compañeros.

La paralización de este punto, afectó tanto a la comunidad estudiantil como a los trabajadores de la zona, quienes también dependen de este transporte para llegar a sus destinos.

Antecedentes

Los conductores de taxis suspendieron el 18 de septiembre el servicio hacia la colonia Kennedy y la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) en protesta por el asesinato de su compañero, Luis Alfonso Torres Valladares, víctima de extorsión.

El crimen se produjo tras el incumplimiento en el pago de la extorsión, lo que ha dejado a los taxistas preocupados por su seguridad y la de sus familias. Muchos de ellos expresan su incertidumbre sobre si regresarán a casa tras sus jornadas laborales, mientras el surgimiento de nuevos grupos criminales exige cuotas adicionales.

Los conductores, que prefieren permanecer en el anonimato por temor a represalias, señalaron que la ruta de Kennedy ya paga varias cuotas de extorsión y no pueden afrontar un nuevo cobro. Esta situación ha llevado a muchos a abandonar el trabajo del volante y buscar oportunidades en Estados Unidos, según indican informes.