Un juez del Juzgado en materia de Criminalidad Organizada, Medioambiente y Corrupción dictó medidas sustitutivas a Nasry ‘Tito’ Asfura, precandidato del Partido Nacional. Asfura enfrenta acusaciones de fraude durante su gestión como alcalde de Tegucigalpa. Al salir de la audiencia, afirmó: “Debemos ir a firmar”, refiriéndose a las medidas impuestas.

Las medidas también benefician a siete personas más: Cinthia Borjas, Nilvia Castillo, Mario Zerón, Rony López, Wilmer Rodríguez, Roger Ramírez y Oscar Uriarte, quienes enfrentan los mismos cargos. Asfura depositó 22 millones de lempiras en fianza para “dar tranquilidad” al Ministerio Público. Destacó que el proceso legal que enfrenta es similar al que vivió hace cuatro años, sin cambios en los argumentos presentados.

El exalcalde señaló que, a diferencia de antes, ahora carece de la protección del antejuicio. La Unidad Fiscal Especializada contra Redes de Corrupción (Uferco) lo trata como un ciudadano común. Asfura afirmó: “El que nada debe, nada teme”, aunque evitó calificar la situación como persecución política. No obstante, reconoció que en política “todo se vale”. Reiteró que su comparecencia es a título personal y no implica al Partido Nacional.

Su abogado defensor, Dagoberto Aspra, declaró que “el Ministerio Público pidió prisión preventiva, pero nosotros presentábamos un sólido soporte de arraigo y fianzas”. A pesar de esto, Aspra cuestionó la experiencia del juez, señalando que “no puede valorar con la capacidad suficiente los argumentos que hemos presentado”.

Un caso complejo con una historia sencilla

El pasado 10 de octubre, el Ministerio Público presentó un requerimiento fiscal contra Asfura por los delitos de malversación de caudales públicos y lavado de activos. La oposición ha calificado estas acciones como una persecución política. El juez fijó la audiencia inicial para el próximo 4 de noviembre. Asfura llegó a la audiencia poco antes de las 9:00 de la mañana, acompañado de activistas del Partido Nacional. Se mostró de buen ánimo, sonriente y comunicativo con los medios, haciendo señales desde el interior de la corte.

Las investigaciones del Ministerio Público indican que, entre 2017 y 2018, Asfura habría desviado dinero mediante la emisión de 32 cheques a su nombre y el de Cinthia Borjas y Nilvia Castillo. Estos cheques se solicitaron al banco administrador del fideicomiso de la alcaldía capitalina bajo la justificación de “fondos rotatorios, fondos especiales y reembolsos de gastos”. La Fiscalía sostiene que los cheques fueron depositados en cuentas personales de los imputados y que el dinero “fue desviado para financiar campañas políticas, cubrir gastos no oficiales de la alcaldía, pagar tarjetas de crédito de Asfura y sus descendientes, y realizar compras personales, como

#Nacional 🔴| "22 millones pusimos en fianzas, todo para que el Ministerio Público se sintiera tranquilo, que no hay nada detrás ni nadie está saliendo a la carrera", manifestó Nasry Asfura, precandidato presidencial del Partido Nacional. pic.twitter.com/zyQjqXwFo0

— ICN.Digital (@ICNDigital) October 21, 2024