El Ministerio Público ha emitido una alerta roja internacional para la captura de Óscar Serrano, exdirector de la Casa Hogar Corazón a Corazón, acusado de graves delitos contra menores de edad. Serrano enfrenta cargos por trata de personas en la modalidad de trabajo forzado, violación continuada, otras agresiones sexuales, trata de personas en adopción irregular, aborto en grado de tentativa inacabada, y estupro agravado. Las investigaciones revelan que Serrano habría cometido estos crímenes contra al menos 35 menores de edad.
El caso de Serrano resalta la falta de supervisión en la Casa Hogar Corazón a Corazón. La última inspección por parte de la extinta Dirección de la Niñez y Familia ocurrió en 2019, dejando un vacío de control que permitió a Serrano operar con impunidad. Este hecho subraya la vulnerabilidad de los menores en instituciones no reguladas.
Serrano, conocido como «El Tío,» utilizaba su posición como pastor para captar a los menores. Se acercaba a familias de escasos recursos, prometiendo un futuro mejor para sus hijos e hijas. Sin embargo, los documentos encontrados en la casa hogar indican que los menores no estaban en situación de riesgo social, lo que sugiere que Serrano engañó deliberadamente a las familias.
La Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ) ha revelado que Serrano se encuentra actualmente en los Estados Unidos, prófugo de la justicia hondureña. Las autoridades han intensificado sus esfuerzos para localizar y extraditar a Serrano, quien representa una amenaza continua para la seguridad de menores vulnerables.
Este caso es un claro recordatorio de la importancia de una supervisión rigurosa en instituciones que albergan a menores y de la necesidad de que las autoridades actúen con celeridad y firmeza para proteger a los más indefensos de la sociedad.