Ciudad de México.- El Gobierno de México aseguró que la entrega de agua a Estados Unidos se realiza conforme al Tratado de Aguas de 1944 y que el abasto nacional está garantizado, tanto para consumo humano como para agricultura.

Para optimizar la gestión hídrica, se implementan proyectos de tecnificación en los Distritos 025 y 026 de Tamaulipas y 05 y 009 de Chihuahua, todos en la Cuenca mexicana del Río Bravo. Estas medidas buscan beneficiar a agricultores y población local, asegurando el acceso al agua en todo momento.

El 12 de diciembre, México y Estados Unidos acordaron liberar 249 millones de metros cúbicos de agua acumulada tras la temporada de lluvias. La decisión respeta la infraestructura existente y prioriza el abastecimiento sin exceder lo estipulado por el Tratado.

Ambos países trabajan en un plan conjunto para las entregas del ciclo vigente, que deberá definirse a más tardar el 31 de enero de 2026. El Tratado establece la entrega anual de agua de seis afluentes mexicanos, con ajustes posibles en caso de sequía extraordinaria y ciclos de compensación cada cinco años.

Durante el ciclo 2020-2025, la cuenca del Río Bravo enfrentó una sequía histórica que impidió cumplir la cuota completa. Por ello, México dispone de un ciclo adicional hasta octubre de 2030 para compensar los volúmenes pendientes.

También te puede interesar:

El acuerdo de 2025 refuerza la cooperación bilateral, la gestión oportuna del agua y la posibilidad de ajustar entregas según el cumplimiento del Tratado. México prevé liberar 249.163 millones de metros cúbicos de agua a Estados Unidos desde la semana del 15 de diciembre.