Honduras ha marcado un hito en la región de las Américas al convertirse en el primer país en iniciar la construcción del Listado Nacional de Pruebas de Diagnóstico In Vitro (LNPDI). Este paso crucial, liderado por la Secretaría de Salud, tiene como objetivo estandarizar y mejorar la precisión diagnóstica en todos los niveles del sistema de salud nacional. El LNPDI servirá como un documento de referencia esencial, garantizando que las pruebas diagnósticas sean consistentes en los diferentes niveles de atención y fortaleciendo así la atención médica en el país.

Los diagnósticos in vitro son pruebas realizadas en muestras biológicas, como sangre o tejidos, que permiten detectar enfermedades o condiciones de salud. Estas pruebas son fundamentales para proporcionar información precisa sobre la salud del paciente, guiar decisiones clínicas y mejorar la efectividad del tratamiento.

En el marco de este proyecto y bajo el lema “Diagnósticos correctos, ¡pacientes seguros!”, se llevó a cabo el «Taller de Búsqueda Sistemática de Información Científica». Este evento fortaleció a los expertos en microbiología, permitiéndoles seleccionar las tecnologías más avanzadas para asegurar diagnósticos precisos y oportunos. Esto no solo mejora la seguridad de los pacientes, sino también los resultados de salud en general.

La importancia del LNPDI radica en su capacidad para orientar y regular de manera más efectiva la adquisición y prescripción de pruebas de diagnóstico, contribuyendo así al mantenimiento y mejoramiento de la salud de la población hondureña. Este esfuerzo alinea a Honduras con las prácticas globales, garantizando un acceso equitativo a diagnósticos esenciales.

El taller contó con la colaboración de destacados expertos internacionales de la Organización Panamericana de la Salud y del CUFAR, un centro colaborador de la OMS. Estos profesionales brindaron su experiencia en la elaboración del LNPDI y en el desarrollo de un Listado de Medicamentos.

A través de este esfuerzo, Honduras no solo reafirma su compromiso con la salud pública, sino que también establece un modelo a seguir para otros países de la región, demostrando cómo la planificación estratégica y los estándares rigurosos pueden transformar el cuidado de la salud.