Cientos de habitantes de la ciudad siciliana de Agrigento se manifestaron el viernes contra la escasez de agua provocada por la sequía y la mala gestión que agrava el impacto del calentamiento global en la gran isla italiana.
Los manifestantes marcharon tras una gran pancarta que proclamaba «Queremos agua», al grito de «vergüenza, vergüenza» o «el agua es un derecho de todos, el agua es un derecho fundamental» y alternando músicas con pitidos a las autoridades municipales.
«La situación del agua en la ciudad y su provincia se ha vuelto insoportable, con frecuentes interrupciones del suministro y racionamientos insostenibles», lamentó en un comunicado la asociación que convocó a la protesta.
La población de Agrigento, una ciudad de 55.000 habitantes en la costa sur de Sicilia, «está agotada por la falta constante de agua y la gestión ineficiente de los recursos hídricos», agregó.
El arzobispado de Agrigento también denuncio «un suministro de agua inadecuado» y exigió «soluciones estructurales y de emergencia eficaces».
Los principales funcionarios de Sicilia adoptaron el viernes, en una reunión de crisis, medidas que deberían permitir aumentar en un 20% la cantidad de agua disponible en Agrigento en diez días, indicó la agencia italiana de noticias Ansa.
El gobierno italiano declaró en mayo el estado de emergencia en Sicilia, con el fin de liberar fondos para la compra de camiones cisterna que transporten agua, perforar pozos y renovar estaciones de bombeo y desalinización.