Tegucigalpa.- Más de 450 menores han recibido atención este año en la Fundación Hondureña para el Niño Quemado (Fundaniquem), incluyendo un niño de 6 años de Intibucá que sufrió graves quemaduras por manipular pólvora, informó la organización.

Omar Mejía, presidente de Fundaniquem, indicó que el menor llevaba 55 “chifladores” en una bolsa, los cuales se encendieron accidentalmente, provocándole quemaduras en la pierna y los genitales.

El niño permaneció 15 días hospitalizado en el Hospital del Niño Quemado de Tegucigalpa y fue sometido a al menos 10 intervenciones quirúrgicas antes de recibir el alta.

Mejía señaló que la atención de este caso tuvo un costo aproximado de un millón de lempiras y reiteró el llamado al uso responsable de la pólvora durante la temporada navideña, especialmente para proteger a los menores.

Fundaniquem: tipos de quemaduras

Las quemaduras se clasifican según la profundidad del daño en la piel. Las de primer grado afectan solo la capa externa (epidermis), provocando enrojecimiento, dolor leve e inflamación, como ocurre al quemarse con el sol o agua caliente.

Las de segundo grado alcanzan la dermis y la epidermis, causando ampollas, dolor intenso y enrojecimiento; suelen producirse por contacto con fuego, líquidos muy calientes o chispas de pólvora.

Las de tercer grado dañan todas las capas de la piel e incluso los músculos o huesos, dejando la piel blanca, carbonizada o negra, y a veces sin dolor debido al daño de los nervios.

LEA:

Medidas de precaución para prevenir quemaduras

Para prevenir quemaduras en el hogar, es importante evitar dejar a los niños cerca de estufas, hornillas, chimeneas o velas, mantener los líquidos calientes fuera de su alcance y no usar ropa suelta al cocinar. También se deben revisar cables y enchufes dañados y mantener aparatos eléctricos lejos del agua.

En cuanto a la manipulación de pólvora o fuegos artificiales, solo los adultos deben manipularlos, usando gafas y guantes de protección, manteniéndose alejados de otras personas y de materiales inflamables, y teniendo agua o un extintor cerca en caso de accidente.

Si ocurre una quemadura leve, se debe enfriar la zona con agua fría (no hielo) durante 10-20 minutos, no reventar ampollas, cubrir con una gasa limpia y seca y acudir al médico si la quemadura es extensa, profunda o afecta zonas sensibles como la cara, manos, pies o genitales.