Los Ángeles, Estados Unidos.- Emma Heming, esposa de Bruce Willis, compartió una reflexión íntima sobre cómo vive la Navidad mientras acompaña al actor en su proceso con demencia. Explicó que las fiestas ahora implican ajustes, planificación y una convivencia constante entre la tristeza y la alegría.

En una publicación en su blog, Heming señaló que las celebraciones “se ven diferentes ahora”. Afirmó que la llegada de la demencia no elimina las fiestas, pero sí las transforma. “Cambian”, escribió.

La empresaria explicó que momentos antes simples ahora están marcados por el duelo. Admitió que la Navidad trae una “mezcla de dolor”, porque recuerda cómo eran las cosas antes del diagnóstico.

Bruce Willis, de 70 años, fue diagnosticado con afasia progresiva primaria, una condición vinculada a la demencia frontotemporal. Antes de la enfermedad, el actor participaba activamente en las tradiciones familiares.

“A él le encantaba esta época”, recordó Heming. Contó que Willis preparaba desayunos, salía con sus hijas a la nieve y estaba siempre presente durante las celebraciones.

Emma explicó que esos recuerdos siguen vivos, pero la enfermedad crea una distancia entre el pasado y el presente. “Ese espacio puede doler”, afirmó.

Reconoció que ahora debe asumir tareas que antes hacía su esposo. Entre ellas, colocar las luces navideñas o preparar los tradicionales pancakes del desayuno familiar.

También confesó que, en algunos momentos, siente frustración. Aclaró que no es enojo hacia Willis, sino una expresión del vacío que deja la dinámica anterior.

“La alegría no cancela la tristeza. La tristeza no cancela la alegría. Coexisten”, escribió. Animó a otras familias a aceptar esa convivencia emocional.

Para esta Navidad, adelantó que mantendrán algunos rituales, aunque con cambios inevitables. Abrirán regalos juntos, desayunarán en familia y verán una película navideña.

En una entrevista reciente con People, Heming reiteró que Bruce siempre disfrutó esta época del año. Dijo que seguirán celebrándola con él, incluso viendo Die Hard, que considera una película navideña.