Escándalo: Caso de corrupción en el poder judicial
by Fernando Guillen |
Tegucigalpa.- Este viernes, el caso de corrupción en el Poder Judicial de Tegucigalpa se intensifica con la comparecencia del juez Marco Antonio Vallecillo, acusado de extorsionar para manipular decisiones judiciales en casos importantes.
La audiencia inicial se realizará hoy a las 9:00 a.m. en el Juzgado de Letras Penal con Competencia Nacional Territorial de Criminalidad Organizada, Medioambiente y Corrupción. Vallecillo enfrenta cargos por extorsión, según la Fiscalía Especial para el Enjuiciamiento de los Servidores del Sector Justicia (FEES-SJ), en perjuicio de un testigo protegido.
Denuncias del fiscal general
El escándalo recobró relevancia cuando el Fiscal General, Johel Zelaya, denunció públicamente a Vallecillo en redes sociales. Zelaya acusó al juez de usar su nombre para extorsionar a involucrados en casos emblemáticos que se tramitaban en los tribunales especializados, manejando al menos 60 expedientes.
Reacciones y defensas en la corte suprema
La controversia también afectó a la máxima autoridad de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), la magistrada presidenta Rebeca Ráquel Obando. Obando salió a desmentir las acusaciones y defendió a su esposo y familiares implicados en el escándalo, que también reveló otras irregularidades, como el extravío de expedientes y manipulación de diligencias.
El juez Vallecillo, inicialmente exculpando a la titular de la CSJ y su entorno, alegó que sus derechos fueron violentados y que se borró evidencia de su dispositivo móvil para incriminarlo. Su abogado, Frank Galo, presentó dos escritos ante la Corte de Apelaciones para recusar al juez Juan Carlos Colindres, alegando conflicto de interés y solicitando la intervención de un perito independiente.
Decisión de la Corte de Apelaciones
La noche del jueves, la Corte de Apelaciones en Materia de Criminalidad Organizada, Medio Ambiente y Corrupción decidió rechazar la solicitud de recusación contra el juez Colindres. El tribunal ordenó que el proceso penal continúe bajo la dirección de Colindres, desestimando las solicitudes de la defensa para cambiar al juez o nombrar un perito diferente.
Este escándalo subraya las tensiones y desafíos dentro del Poder Judicial en Honduras y plantea serias preguntas sobre la integridad de las instituciones encargadas de la justicia en el país.