España.- La Sociedad Española de Epidemiología (SEE) sostuvo que el riesgo de que la gripe aviar pase de las aves a los humanos continúa siendo “muy bajo” y ocurre únicamente en situaciones excepcionales.

La entidad insistió en que los brotes detectados en animales no deben interpretarse como una amenaza inmediata para la población.

El virus responsable de la mayoría de los casos es el Influenza A(H5N1), presente en aves migratorias y capaz de extenderse a aves de corral e incluso a algunos mamíferos.

En Estados Unidos, su presencia en ganado vacuno encendió las alertas, aunque la transmisión hacia humanos sigue siendo extremadamente infrecuente.

Desde 2003 hasta agosto de 2025, se registraron 990 infecciones humanas por A(H5N1) y 475 fallecimientos en 25 países.

Cifras de contagios

A pesar de las cifras, los expertos remarcan que la exposición directa a aves enfermas o entornos contaminados es el principal detonante de contagio.

El contagio puede ocurrir al inhalar partículas contaminadas o al tocarse los ojos, la nariz o la boca después de manipular aves muertas o superficies expuestas a sus secreciones.

No se ha documentado transmisión sostenida entre humanos, un elemento clave que mantiene bajo el nivel de alerta.

Los síntomas en humanos pueden variar: algunas personas no presentan señales, mientras que otras desarrollan cuadros graves como neumonía. El riesgo aumenta en adultos mayores y en quienes padecen enfermedades respiratorias crónicas.

LEA: EE.UU. alivia temores: Gripe aviar no es pandémica aún

El clado 2.3.4.4b del virus H5N1, detectado en varios brotes recientes, ha demostrado capacidad para infectar mamíferos, lo que obliga a reforzar la vigilancia. Sin embargo, los especialistas reiteran que esto no implica una amenaza inminente para la población general.

Los trabajadores de granjas avícolas y los equipos encargados del sacrificio de animales infectados son el grupo más expuesto. Para ellos se recomiendan medidas estrictas de protección, entre ellas mascarilla, gafas, botas y trajes especiales que eviten el contacto con secreciones de las aves.

La Agencia Europea de Medicamentos ya aprobó dos vacunas humanas contra el A(H5N1), Celldemic e Incellipan, aunque no se contempla su uso masivo en Europa. Los epidemiólogos también insisten en la importancia de la vacuna anual contra la gripe estacional para evitar coinfecciones que faciliten mutaciones peligrosas.