Tegucigalpa, Honduras.- – La Secretaría de Salud (Sesal) ha confirmado este jueves el primer caso de gusano barrenador en humanos en Honduras en 2025.

Así lo informó el jefe de vigilancia, Lorenzo Pavón, quien explicó que este caso es el primero en casi tres décadas, ya que no se habían registrado incidentes de esta enfermedad desde 1995.

El paciente, un hombre de la tercera edad, tiene una herida en el pie izquierdo, la cual fue infectada por la mosca que transmite el gusano barrenador.

Según Pavón, el insecto volador tuvo contacto con la llaga del paciente, causando la infección.

El galeno advirtió que las personas que trabajan en granjas o que están en contacto constante con ganado deben tomar precauciones extremas, sobre todo si tienen heridas abiertas. Este gusano barrenador, conocido científicamente como Cochliomyia hominivorax, es una enfermedad zoonótica que se transmite del ganado a los seres humanos.

Esta infección causa miasis, una parasitosis que afecta la piel de los animales y los humanos, resultando en lesiones graves y afectando principalmente a aquellos que tienen contacto con los animales.

El Ministerio de Salud había estado trabajando en un proceso de eliminación de la enfermedad en humanos. Sin embargo, el año pasado, la SESAL emitió una alerta sanitaria debido al aumento de casos en el sector animal, especialmente en países vecinos.

Estadísticas

Hasta la fecha, se han registrado 254 casos de gusano barrenador en el sector ganadero, lo que ya se considera una epidemia. Esta situación se ha convertido en un desafío para la producción pecuaria en el país, ya que el gusano barrenador reduce la productividad en la industria ganadera, al generar altas tasas de mortalidad y afectar la producción de leche y carne.

A pesar de los esfuerzos de erradicación en América Central, el gusano barrenador sigue siendo un problema en zonas de América del Sur y el Caribe.

En países como Estados Unidos y México, la enfermedad ha sido eliminada, pero su presencia en la región continúa siendo un riesgo para los ganaderos y la salud pública. La SESAL sigue monitoreando de cerca la situación para evitar su propagación y está tomando medidas preventivas para proteger a la población y al ganado.