Tegucigalpa, Honduras. Falso de toda falsedad. La desinformación es una amenaza para la democracia, tal como lo estamos viendo rumbo a las #EleccionesHonduras2025.
En horas recientes, el precandidato presidencial por el Partido Liberal, Salvador Nasralla, convocó a medios de comunicación para denunciar un supuesto intento de perjudicarlo en el proceso electoral primario. ¿La prueba? Un audio filtrado en el que presuntamente se escucha el plan de la dirigente política Fabiola Abudoj de manipular mesas electorales para favorecer a su nuevo aliado político, Jorge Cálix.
“El audio falso que está circulando es un deepfake, una manipulación digital creada con Inteligencia Artificial, una mentira más en su campaña sucia”, respondió Abudoj ante las acusaciones.
¿Cómo se desinforma?
En estos ejemplos vemos cómo la desinformación en elecciones puede manipular la opinión pública y afectar la democracia.
¿Cómo identificar un deepfake?
Preste atención a la iluminación del video, la continuidad de la actividad en los planos, la falta de dinamismo, los desenfoques o la precisión del zoom en algunas secuencias. En el caso de que el protagonista sea una persona, se suele recomendar atender al parpadeo, que en el caso de videos falsos suele ser menor; prestar atención a las tonalidades de la piel, que tienden a no ser homogéneas; y observar gestos que puedan resultar extraños, recomienda Leticia Rodríguez Fernández, autora de “Propaganda digital: comunicación en tiempos de desinformación”, obra publicada en 2021.
La desinformación en época electoral es una estrategia utilizada para manipular la opinión pública y afectar el comportamiento de los votantes. Se propaga a través de noticias falsas, teorías de conspiración, imágenes editadas, videos manipulados y contenido engañoso en redes sociales y medios de comunicación.
¿Qué es la desinformación?
«Es la difusión coordinada de información engañosa, falsa o imprecisa que de manera intencional busca influir en el comportamiento de la gente (cómo votar, cómo tomar decisiones que afectan a la sociedad, etc.) y manipular las creencias, emociones y opiniones de la ciudadanía».
Ana María Saavedra, directora de Colombia Check
Desinformación es contenido intencionalmente falso y diseñado para causar daño. Está motivado por tres distintos factores: ganar dinero; tener influencia política; o causar problemas por el simple hecho de hacerlo, agrega Saavedra.
“Las redes no son el futuro, son el presente y se demuestra cada vez más que son una herramienta importante para llegar a los jóvenes que hoy en día forman parte de un gran porcentaje de nuestro electorado”.
Malena Dip, autora de “Entre votos y caníbales: el lado B del uso de redes sociales en política” (2023)
En el escrito, la autora llega a la conclusión de que la política en redes sí importa, “el tema es cómo nosotros la comunicamos. Eso es lo que hay que cambiar, lo que hay que mejorar. Hasta que eso no suceda, la mayoría de los políticos van a seguir usando mal las redes”.
Dentro ese mal uso que habla la autora entra la desinformación, que es una amenaza real para la democracia. Combatirla requiere un esfuerzo colectivo de ciudadanos, medios y plataformas digitales.
Formas comunes de desinformación electoral
Noticias falsas y titulares sensacionalistas. Información inventada o distorsionada para beneficiar o perjudicar a un candidato.
Deepfakes y manipulación audiovisual. Videos o audios falsificados para hacer parecer que un candidato dijo o hizo algo que nunca ocurrió.
Encuestas falsas o tergiversadas. Datos manipulados para crear una percepción errónea sobre la intención de voto.
Cuentas falsas y bots en redes sociales. Campañas automatizadas para amplificar mensajes engañosos y manipular tendencias.
Descontextualización de hechos. Información verdadera usada fuera de contexto para cambiar su significado.
Difusión de rumores y teorías de conspiración. Narrativas falsas que buscan desacreditar a candidatos o procesos electorales.
Objetivos de la desinformación electoral
• Influenciar la decisión de los votantes
• Desprestigiar a candidatos o partidos políticos
• Generar desconfianza en las instituciones democráticas
• Polarizar y dividir a la sociedad
¿Cómo combatir la desinformación en elecciones?
Verifique las fuentes oficiales antes de compartir información
Use herramientas de fact-checking como Google Reverse Image Search o InVid
Dude de titulares alarmistas o que parecen demasiado impactantes para ser verdad
Compruebe si el contenido proviene de medios confiables
Fomente la educación mediática. Aprendamos a identificar y desmentir información engañosa.
Estas prácticas no se combaten con una regulación que limite la libertad de expresión, sino con alfabetización mediática y herramientas como la verificación de datos.