«Chapito» se declara no culpable en EEUU
by Tania Gálvez |
Joaquín Guzmán López, hijo de Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán, se declaró no culpable de todos los cargos en su contra cinco días después de llegar a Estados Unidos. En la Corte del Distrito Norte de Illinois, el integrante de Los Chapitos enfrentó por primera vez a la justicia estadounidense.
«Guzmán López escuchó cada uno de los cargos que el gobierno de EEUU sostiene en su contra,» acompañado de su abogado Jeffrey Lichtman. Acto seguido, el joven narcotraficante se declaró no culpable.
Diversos medios de comunicación y periodistas estadounidenses, como Jason Meisner del Chicago Tribune, dieron a conocer estos hechos. «No se mencionó en la corte al jefe del Cártel de Sinaloa, Ismael ‘El Mayo’ Zambada García, quien se alega que Guzmán López lo entregó por la fuerza a Estados Unidos,» agregó Meisner.
Perfil criminal del «chapito»
En 2023, las autoridades acusaron a Guzmán López junto con tres de sus hermanos, conocidos como los «Chapitos,» de tráfico de drogas y lavado de dinero en Estados Unidos. Estos cargos están relacionados con la toma del liderazgo del Cártel de Sinaloa después de la extradición de su padre en 2017. El Chapo, condenado por asesinato y tráfico de drogas en 2019, cumple cadena perpetua en una prisión de máxima seguridad en Colorado.
Guzmán López, de unos 30 años, debe comparecer ante un tribunal federal de Chicago. Las autoridades estadounidenses detuvieron a Guzmán López cerca de El Paso, Texas, junto con Ismael «El Mayo» Zambada, el septuagenario capo del Cártel de Sinaloa.
«Guzmán López engañó a Zambada para que subiera a un avión de hélice en México diciéndole que iban a buscar propiedades en el norte del país,» dijeron funcionarios estadounidenses. El avión llevó a ambos hombres a Estados Unidos, donde Guzmán López había planeado entregarse, pero Zambada no.
La semana pasada, Zambada se declaró inocente de los cargos de narcotráfico en un tribunal federal de El Paso. Su abogado, Frank Pérez, cuestionó la versión de los hechos ofrecida por los funcionarios estadounidenses, afirmando que «Guzmán López secuestró a Zambada y lo llevó a Estados Unidos contra su voluntad.»
Jeffrey Lichtman, abogado de Guzmán López, se negó a comentar sobre la acusación de secuestro, diciendo únicamente: «El señor Zambada es libre de emplear cualquier defensa que desee contra los cargos que enfrenta.»