Belén recupera su luz navideña y envía un mensaje de esperanza
Belén, Cisjordania.- La ciudad encendió su árbol de Navidad por primera vez en dos años, luego de que la guerra en Gaza obligara a suspender todas las decoraciones como gesto de duelo por las víctimas del conflicto. Bajo la lluvia y entre estrictas medidas de seguridad, cristianos y musulmanes se reunieron en la Plaza del Pesebre para presenciar un acto que simboliza resistencia y deseo de paz.
La ceremonia comenzó con el himno nacional palestino y un minuto de silencio por los fallecidos en Gaza. El encendido marcó un momento de alivio para una comunidad golpeada por la crisis económica y la ausencia de turismo, motor histórico de la ciudad.
Belén ha sufrido dos años de locales cerrados, hoteles vacíos y comercios en ruina. Jack Tabash, un comerciante de más de 80 años, abrió su tienda solo para la ocasión. Contó que debió cerrar durante todo el conflicto y que espera que la tregua permita el regreso de visitantes. “Cuando no hay turistas, mucha gente sufre”, dijo.
Para los cristianos presentes, la ceremonia fue más que una tradición. Pierre Demarole, un dominico francés que estudia en Jerusalén, destacó que celebrar la Navidad en Belén tras años de tensión es “un acontecimiento” que recuerda el sentido espiritual de la fecha.
La mezcla de credos resaltó el clima de unión. Abir Steyn, una joven musulmana de 27 años, asistió con estudiantes de su universidad y afirmó que, pese al miedo y las restricciones militares, buscan pequeños espacios para celebrar. “Todos somos hermanos. Así nos damos esperanza”, expresó.
El encendido del árbol devolvió a Belén un gesto de normalidad en medio de un contexto todavía frágil, pero cargado de deseo por reconstruir la vida cotidiana y reencontrar la paz que la región anhela.