El Congreso Nacional fue testigo de un acto de violencia que dejó al diputado del Partido Nacional, Antonio Rivera Callejas, con dolor de cabeza y una experiencia aterradora. Rivera Callejas fue agredido por colectivos del partido Libre durante. El saldo: siete puntos en su cabeza.
El Congreso Nacional fue testigo de un acto de violencia que dejó al diputado del Partido Nacional, Antonio Rivera Callejas, con dolor de cabeza y una experiencia aterradora. Rivera Callejas fue agredido por colectivos del partido Libre durante. El saldo: siete puntos en su cabeza.

-El diputado del Partido Nacional, Antonio Rivera Callejas, compartió su amarga experiencia después de ser agredido por colectivos del partido Libre.

El Congreso Nacional fue testigo de un acto de violencia que dejó al diputado del Partido Nacional, Antonio Rivera Callejas, con dolor de cabeza y una experiencia aterradora. Rivera Callejas fue agredido por colectivos del partido Libre durante. El saldo: siete puntos en su cabeza.

El Congreso Nacional fue testigo de un acto de violencia que dejó al diputado del Partido Nacional, Antonio Rivera Callejas, con dolor de cabeza y una experiencia aterradora. Rivera Callejas fue agredido por colectivos del partido Libre durante. El saldo: siete puntos en su cabeza.

El escenario estaba compuesto por varios diputados del Partido Nacional, quienes se vieron confrontados por colectivos del partido Libre, convocados por el gobierno a través del ministro de Planificación, Ricardo Salgado.

La presencia policial no impidió que los miembros de los colectivos arrojaran objetos, hiriendo a diputados de la oposición. En el caso de Antonio Rivera Callejas, una botella impactó en su cabeza, causándole una herida que comenzó a sangrar.

Rivera Callejas comentó: «Después de los incidentes, me dirigí a la sala de emergencias del Hospital Medical Center, donde me realizaron una tomografía y suturaron la herida con siete puntos. Aún siento dolor de cabeza y nerviosismo, pero estoy agradecido por estar vivo».

El diputado también compartió el contexto de los incidentes: «Ayer, los partidos Nacional, Liberal y PSH decidieron llevar a cabo una sesión para autoconvocarse y prorrogar las sesiones ordinarias, trabajando en noviembre, diciembre y enero para compensar el trabajo no realizado».

Fue un joven de camisa roja

En cuanto a su experiencia durante el ataque, explicó: «Lo ubico, fue un joven con una camisa roja sostenía una botella y estaba intentando agredir a Tomás Zambrano. Al final, la botella impactó en mí, y al tocar mi cabeza y ver la sangre, me preocupé profundamente. En ese momento, lo consideré un acto de terrorismo y me puse nervioso».

«Fue después de que un compañero comenzó a golpear con fuerza una puerta con un martillo para liberarme, ya que sangraba profusamente, que finalmente alguien apareció con una llave y logramos salir», relató Rivera Callejas.

Este incidente ha dejado en evidencia la necesidad de garantizar la seguridad en el Congreso Nacional y el respeto por la integridad de los legisladores.

Elección del nuevo fiscal

Por otra parte, los diputados llevan dos meses sin celebrar sesiones, luego de que a finales de agosto no pudieron lograr un consenso para elegir a los nuevos fiscal general del Estado y fiscal general adjunto, quienes debieron asumir el 1 de septiembre.

Después de los disturbios, la oposición, con al menos 72 diputados, de los 128 que integran el Legislativo, se autoconvocó para celebrar una sesión ordinaria, mientras que Redondo había convocado desde el lunes para una extraordinaria, el próximo jueves.

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