El presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador (AMLO) ha emitido un comunicado diplomático en el que aclara su postura sobre la transparencia electoral en Venezuela. AMLO ha señalado que reconoce la independencia del pueblo venezolano y su derecho a la no intervención internacional. Sin embargo, el presidente mexicano reconocerá la victoria de Nicolás Maduro solo si esta se sustenta con un conteo de actas.
Esta postura marca una distancia significativa con la posición de AMLO en enero de 2019, durante otra crisis política en Venezuela. En esa ocasión, AMLO desafió al Grupo de Lima y reconoció a Nicolás Maduro como el único presidente legítimamente electo, en contraposición a Juan Guaidó, quien se había autoproclamado presidente encargado.
El cambio en la posición de AMLO refleja su compromiso con su promesa de respeto a la Constitución y a los principios de no intervención internacional. Además, muestra su adherencia al respeto por los derechos humanos, la autodeterminación de los pueblos, y la solución pacífica de los conflictos. No obstante, el presidente mexicano ha generado sorpresa al exigir más que la palabra de Maduro para validar el proceso electoral, una actitud que recuerda la posición de su homólogo brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva. Lula también cuestionó la transparencia electoral en Venezuela, alineándose con una tendencia de líderes políticos en América del Sur que demandan garantías adicionales para confiar en los procesos electorales en la región.
Este giro en la postura de AMLO resalta la dificultad de la política internacional en América Latina, donde la confianza en los procesos electorales a menudo está marcada por la desconfianza y las exigencias de transparencia.