Aachen, Alemania.- Un tribunal alemán condenó a un hombre a ocho años y seis meses de prisión por drogar, violar y filmar a su esposa durante varios años. El caso generó un fuerte debate sobre la protección de las víctimas y la regulación del contenido de abuso sexual en internet.

El fallo fue emitido por un tribunal de la ciudad de Aachen. El acusado, identificado como Fernando P., de 61 años, fue hallado culpable de cometer abusos sexuales reiterados en el domicilio conyugal. Además, grabó los ataques y los difundió en plataformas digitales sin el conocimiento de la víctima.

Según la sentencia, el hombre violó “la esfera más íntima de la vida privada” en al menos 34 ocasiones. Cuatro de los casos incluyeron violación agravada y lesiones corporales peligrosas. También fue condenado por coacción sexual agravada y agresión sexual.

La investigación determinó que los hechos ocurrieron entre 2018 y 2024, aunque la acusación inicial abarcaba un periodo más amplio. El tribunal absolvió al acusado de otros cargos, cuyos detalles no fueron revelados. La sentencia puede ser apelada.

Organizaciones de derechos de las mujeres calificaron el caso como histórico. La campaña Nur Ja Heisst Ja (“Solo sí es sí”) advirtió que la legislación alemana aún se basa en el principio de “no significa no”, lo que deja desprotegidas a víctimas que no pueden expresar rechazo, como ocurre cuando son drogadas.

Activistas y expertos alertaron también sobre la dimensión digital del delito. En Alemania, la posesión de material de abuso sexual no siempre es delito, lo que ha generado llamados urgentes a reformar la ley y criminalizar su tenencia y difusión.

El fallo reavivó el debate político sobre la necesidad de actualizar las normas de consentimiento y reforzar la protección legal frente a nuevas formas de violencia sexual facilitadas por plataformas digitales.