Para el año 2024, se asignaron solamente 1.66 millones de lempiras para la compra de textos escolares, destinados a los 1.7 millones de estudiantes que dependen del sistema público, es decir, menos de un lempira por alumno.
En Honduras, la última distribución de libros a todos los estudiantes del sistema educativo público tuvo lugar en 2016. Para el año 2024, el Congreso Nacional aprobó una asignación de tan solo 1.66 millones de lempiras destinados a la compra de libros para los 1.7 millones de niños, niñas y adolescentes matriculados en el sistema.
El Informe de Progreso Educativo (IPE) establece que para aumentar los niveles de aprendizaje es primordial la impresión y distribución de materiales educativos, tales como libros de texto y cuadernos de trabajo para uso individual de cada estudiante matriculado.
Por su parte, el Tercer Estudio Regional Comparativo y Explicativo (TERCE), de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), indica que los estudiantes que tienen individualmente un libro de matemáticas obtienen hasta 90 puntos más (de un total de 700) sobre aquellos que no poseen este recurso. No obstante, en Honduras, el presupuesto asignado a la compra de textos escolares para el próximo año equivale a 0.98 centavos de lempira por estudiante.
El último registro de entrega de textos a casi todos los estudiantes matriculados en el sistema educativo público data de 2015-2016, cuando se entregaron 1.7 millones de textos escolares de español, matemáticas y ciencias.
En 2018 se entregaron 113,848 textos de matemáticas para estudiantes de primer a noveno grado, los que resultaron escasos. Para 2023, el presupuesto asignado por la Secretaría de Educación para compra de textos escolares fue de apenas 0.21 millones de lempiras, por lo que el incremento del presupuesto destinado para tal fin en 2024 es de 1.44 millones de lempiras, es decir 677 %. A pesar del aumento, el monto no permitirá que cada niño, niña y adolescente que depende del sistema educativo público pueda contar con libros el próximo año.
Estudiantes deben compartir libros
El Programa de Evaluación Internacional de Estudiantes (PISA, por sus siglas en inglés), de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), ha señalado que Honduras es uno de los pocos países en el mundo, donde los alumnos tienen que compartir los libros de textos porque no son suficientes para todos.
Este problema ha sido persistente a través de los años. En 2018, PISA apuntó que el 23 % de los estudiantes están en centros educativos donde hay un libro por estudiante; 46 % está en centros educativos en donde los directores reportan que no hay ningún libro de texto y en 68 % de los centros educativos, los alumnos deben compartir libros de texto (a veces entre más de dos estudiantes) porque no hay suficientes para el uso individual.
En los últimos años, la Secretaría de Educación ha entregado textos con ayuda de la cooperación internacional, pero sin una política clara de producción, distribución y equidad en el sector educativo, esto ha provocado que muchos estudiantes se queden sin textos.
“Después del docente, el libro de texto es lo más importante para el aprendizaje; sin embargo, en nuestro país los textos no alcanzan para todos los estudiantes, por lo que la distribución de textos para todos los niños, niñas y adolescentes matriculados en el sistema educativo público sería un legado de la presidenta Xiomara Castro”, manifestó Dennis Cáceres, director de Educación de ASJ.
Ante el actual panorama, urge que el Estado hondureño garantice la distribución de textos escolares para todos los alumnos del sistema educativo público el próximo año.
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Pavel Aguirre 
Fernando