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Ramala, Territorios Palestinos.- Cisjordania y Jerusalén Este amanecieron el lunes prácticamente paralizados tras una huelga general convocada por grupos políticos palestinos. El motivo: exigir el fin de la guerra en la Franja de Gaza, que ya lleva 18 meses de enfrentamientos.

«Hoy he recorrido toda la ciudad y no he encontrado ni un solo lugar abierto», dijo Fadi Saadi, comerciante de Belén, a la agencia AFP. Las tiendas, escuelas y edificios gubernamentales permanecieron cerrados. En Ramala, donde se concentra la administración de la Autoridad Palestina, se espera una manifestación a lo largo del día.

Unidad entre Fatah y Hamás

La huelga fue convocada por una coalición de movimientos políticos, incluidos Fatah y Hamás. El llamado fue a manifestarse “en todos los territorios palestinos ocupados, en los campos de refugiados y entre quienes apoyan nuestra causa”. Según Issam Baker, coordinador de movimientos en Ramala, el nivel de participación es el más alto desde el inicio de la guerra en Gaza, el 7 de octubre de 2023.

Desde que estalló el conflicto actual, la violencia también se ha intensificado en Cisjordania. Según cifras de la Autoridad Palestina, al menos 918 palestinos han muerto en esta región desde octubre, muchos a manos de soldados o colonos israelíes.

También en Jerusalén Este

En Jerusalén Este, de mayoría palestina y ocupada por Israel desde 1967, los comercios también cerraron sus puertas. La huelga fue percibida como un acto de resistencia civil y un símbolo de unidad frente a la ofensiva israelí en Gaza.