Tegucigalpa. Parecía que el Consejo Nacional Electoral (CNE), ante la ausencia del consejero propietario Marlon Ochoa, se quedaba sin opciones para integrar quórum en la sesión de pleno convocada para este miércoles, en la que debía emitirse la declaratoria para proclamar presidente electo de Honduras al nacionalista Nasry Asfura para el periodo 2026-2030.

El escenario apuntaba a un nuevo bloqueo, luego de que Ochoa anunciara su no presencia a la sesión y negativa a firmar la resolución tras denunciar presuntas irregularidades en el proceso electoral y cuestionar que se avanzara sin haber concluido el escrutinio del 100 por ciento de las actas ni resuelto unas 9 mil impugnaciones al conteo y nulidades pendientes.

Esto porque, al igual que Ochoa, de Libertad y Refundación (Libre), se daba por descontado que los consejeros suplentes Carlos Cardona y Karen Rodríguez, ambos vinculados al mismo instituto, no acudirían al llamado del pleno, tal como había ocurrido en otros momentos previos del proceso en el que el consejero en propiedad declinó sesionar.

Pero a las 2: 45 de la tarde del 24 de diciembre, cuando dio inicio la sesión virtual hecha por Zoom, el consejero suplente Carlos Cardona apareció en la transmisión y permitió integrar quórum junto a Ana Paola Hall, representante del Partido Liberal y presidenta del organismo, y Cossette López, del Partido Nacional. Y así los tres estamparon su firma.

La inesperada comparecencia de Cardona se selló tres días antes, cuando altos dirigentes del Partido Nacional lograron persuadirlo, de acuerdo con una fuente de entero crédito que tuvo conocimiento directo de las gestiones y reveló a ICN News algunos detalles del acercamiento.

“Lo de Cardona se arregló en los últimos tres días, obviamente tenía miedo de que Libre tomara represalias“, indico la fuente, la que no precisó qué convenció al consejero a estampar su firma en la declaratoria.

Para cuidar de su integridad, “Cardona estuvo resguardado, guardadito”, indicó la fuente, al sugerir que se le dio algún tipo de protección, aunque no se detalló si estuvo bajo resguardo de alguna autoridad, en su casa o en otro sitio.

Esta seguridad, amplio la fuente, fue similar a la que gozaron las consejeras Hall y López, quienes, ante el rumor de que serían capturas por el Ministerio Público por cometer supuestos delitos electorales, optaron por sesionar de forma virtual y habrían estado en una embajada.

Otra fuente confirmó que las pláticas con Cardona se hicieron bajo estricto sigilo, como una operación de espionaje, en la que se evitó que las pláticas se hicieron sin llamadas telefónicas ni mensajería.

Primer obstáculo

La declaratoria de las elecciones del 30 de noviembre pareció empantanarse el martes 23 de diciembre, luego de que Ochoa abandonara la sesión de pleno que se realizaba de forma virtual, tras exponer una denuncia por presuntas irregularidades en el proceso electoral y reiterar su rechazo a que se avanzara hacia la proclamación presidencial sin haberse concluido el escrutinio del cien por ciento de las actas ni resuelto impugnaciones y nulidades pendientes.

En sus señalamientos, Ochoa insistió en que no debía avanzarse hacia la declaratoria sin haberse concluido la revisión de todas las actas con inconsistencias, al señalar que el propio organismo electoral había reconocido que existían alrededor de 2,700 actas con inconsistencias, pero de las cuales más de 600 aún no habían sido revisadas.

A su juicio, y dada la estrechez del resultado, con una diferencia de 0.74 puntos porcentuales de Asfura sobre su mayor contendor, Salvador Nasralla, del Partido Liberal, la revisión completa de esas actas resultaba indispensable para garantizar la certeza y legitimidad del proceso.

Esta diferencia porcentual representaba unos 27 mil votos más para Asfura, en una contienda en la que ambos superaron los 1.4 millones de votos.

Ochoa, quien ha hecho diversas denuncias de los audios…leyó en esa sesión del martes un documento en el que detalló las que a su juicio son las y luego procedió a presentarlos al Ministerio Público

Ochoa, quien ha presentado ante la Fiscalía diversos audios en los asegura que personajes políticos discuten un complot para ayudar a que Asfura ganara las elecciones, leyó en esa sesión del martes un documento en el que detalló las que a su juicio son otros hechos cometidos por Hall y López que son constitutivos de delitos electorales.

Tras narrar el texto, abandonó la sesión y presentó el escrito en el Ministerio Público.

Contenido de denuncias hecha por Marlon Ochoa al MP:

  • Irregularidades en el Trep: se retuvieron actas para no divulgarlas y se manipuló el código fuente.
  • Sabotaje a la biometría: Se impidió que el registro biométrico del 100 por ciento de los votantes.
  • Escrutinio especial: solo 1,700 mil actas con inconsistencias fueron revisadas, en esas, Nasralla redujo en 10 mil votos la diferencia.
  • Impugnaciones no resueltas: Se emitió la declaratoria sin que se resolvieran solicitudes de impugnaciones
  • Audios:

Pese a su retiro y a la ausencia de su firma, en esa misma sesión el pleno del Consejo Nacional Electoral aprobó avanzar hacia la declaratoria, decisión que, de acuerdo a las dos consejeras propietarias, dejó abierto el camino para que el miércoles se concretara.

¿Podía el Consejo Nacional Electoral avanzar sin Marlon Ochoa? La Ley Electoral establece que el pleno puede sesionar y adoptar decisiones cuando estén presentes al menos dos consejeros propietarios y un consejero suplente, precisamente para los casos en que uno de los propietarios no comparezca o se ausente, como ocurrió en este proceso. La normativa tampoco exige que este tipo de decisiones se adopten por unanimidad.

Algunos juristas, sin embargo, consideraban que no era indispensable la presencia de un consejero suplente, al sostener que la sesión del miércoles constituía una continuación de la realizada el martes, por lo que, aunque Ochoa abandonó esa sesión, el quórum ya se había configurado desde entonces.

Sin embargo, Hall y López tenían claro que no podían dejar ningún flanco abierto ni ofrecer a Ochoa un argumento adicional para cuestionar la legalidad de la sesión por su ausencia.

Por esa razón, ya con Cardona convencido, optaron por incorporarlo, asegurando formalmente el quórum y blindando jurídicamente la declaratoria presidencial.

“La negativa pública y legalmente injustificada a firmar del consejero propietario no debe paralizar una vez más al órgano electoral, en su deber constitucional; y que nadie puede beneficiarse de su propia conducta obstructiva, mucho menos en detrimento de la estabilidad democrática del país, por lo cual se integra a efecto de firma y en aplicación de la ley, al consejero Carlos Enrique Cardona Hernández“, cita la certificación 3014-2025, la que contiene la Declaratoria de Elecciones Generales 2025.

Ochoa, por su parte, sostiene que, como no firmó el acta de la sesión del martes, la declaratoria que se hizo el miércoles no tiene sustento legal.

“Ellas van a pretender de revestir de apariencia de legalidad, en la votación yo no estuve presente y ahorita vamos a solicitarle a la secretaria general, como fedataria pública, que certifique este extremo“.

A su juicio, Ana Paola Hall y Cossette López, “se sumaron al crimen organizado, a la intervención extranjera para declarar a alguien que no es posible certificar que ganó“.

“Ellas van a pretender de revestir de apariencia de legalidad, en la votación yo no estuve presente y ahorita vamos a solicitarle a la secretaria general, como fedataria pública, que certifique este extremo“

Así las cosas, el CNE declaró ganador a Nasry Asfura con 1,479,822 votos, equivalentes al 40.27 %, frente a los 1,452,796 votos (39.53 %) obtenidos por Salvador Nasralla, una diferencia de 27,026 votos, o sea 0.74 puntos porcentuales.

La declaratoria se emitió cuando el organismo había divulgado 18,820 actas, lo que representaba el 98.18 % del total de 19,167 actas del nivel electivo presidencial.

Aunque en el sistema de transmisión del CNE consignó que había 2,792 actas con inconsistencias, solo sometió a escrutinio especial 2,103.

No obstante, al momento de la declaratoria, 316 actas permanecían pendientes de escrutinio especial.

Con este resultado, el Ejecutivo experimentará una vuelta al un gobierno de derecha tras cuatro años de la administración izquierdista de Xiomara Castro, quien culminará su periodo el 27 de enero de 2026.

La antesala de la declaratoria estuvo marcada por un torbellino político: el Ministerio Público abrió investigaciones a partir de audios atribuidos a Cossette López, en los que se hablaba de una supuesta manipulación del proceso para favorecer a Asfura; mientras que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, solicitó públicamente apoyo para el entonces candidato nacionalista y calificó a Salvador Nasralla como una figura no confiable, lo que constituyó un pronunciamiento inédito.

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