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En la ceremonia de traspaso de mando de la Policía Militar del Orden Público (PMOP), donde el coronel Melvin Edgardo Flores Núñez asumió el liderazgo en sustitución del general de brigada Fernando Ramiro Muñoz Bonilla, el general Roosvelt Hernández, jefe del Estado Mayor Conjunto de Honduras, destacó la importancia de la lealtad institucional y la justicia en el ejercicio del mando.

Durante su intervención, Hernández subrayó que los nuevos líderes no solo reciben un cargo, sino un propósito superior ligado a la nación y la Constitución.

El acto tuvo lugar en un contexto marcado por el juicio contra el general en condición de retiro Romeo Vásquez, acusado de participar en el asesinato de Isy Obed Murillo durante la crisis política de 2009. Hernández enfatizó: “La justicia es la esencia de la paz, y sin ella, se engendra el resentimiento”, instando a los comandantes a evitar cualquier acto de injusticia y recordándoles la regla de oro: “No hagas a otro lo que no te gustaría que te hagan a ti”.

Reconoció además los logros del general Ramiro Muñoz Bonilla en la lucha contra el crimen y la mejora de la seguridad en el país, y animó a las Fuerzas Armadas a trabajar de manera coordinada con otras instituciones para fortalecer la justicia y el orden.

El general Ramiro Muñoz, al entregar el mando, hizo un balance de los retos y logros alcanzados durante su gestión. Resaltó los esfuerzos de la PMOP en el combate al narcotráfico y el control de los centros penitenciarios, desafíos que, según él, son esenciales para la seguridad nacional.

También expresó su deseo de que Honduras pueda contar con tecnología para detectar y neutralizar aeronaves no identificadas, una medida que consideró clave para proteger la soberanía del país. Muñoz agradeció a las autoridades, incluida la presidenta Xiomara Castro, por la oportunidad de liderar la PMOP y reafirmó su compromiso con la institucionalidad.

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Por su parte, el coronel Melvin Edgardo Flores Núñez asumió el liderazgo de la PMOP destacando el reto y compromiso que representa su nuevo cargo.

Flores señaló la importancia de fortalecer estrategias como el control de los centros penitenciarios, la operación Control Sectorial Permanente y la lucha contra el narcotráfico, subrayando que dichas acciones han contribuido a reducir la criminalidad en Honduras a menos del 30% por cada 100,000 habitantes. Además, reafirmó su respaldo a las políticas de la presidenta Castro y destacó la necesidad de continuar colaborando con el Instituto Nacional Penitenciario para garantizar la seguridad del país.

El traspaso de mando de la PMOP marcó una etapa de continuidad en la misión de proteger a Honduras, bajo la dirección del coronel Flores, quien asumió el desafío con un firme compromiso hacia el desarrollo nacional.