Tegucigalpa.- Esta intervención forma parte de una estrategia integral y sostenida diseñada para combatir la expansión de los cultivos ilícitos en zonas protegidas del país, como el Parque Nacional Pico Bonito,en la aldea San Marcos de La Masica, Atlántida en la zona norte de Honduras, el cual se extiende por más de 564 kilómetros cuadrados en la región.

Amenazas al ecosistema

El comunicado oficial de las autoridades destaca que el cultivo de coca y la producción de sustancias ilícitas representan una grave amenaza para la flora y fauna que habita en estas áreas protegidas. Además, estos cultivos generan contaminación de suelos y microcuencas, afectando los ecosistemas vitales que sostienen la biodiversidad local.

El Parque Nacional Pico Bonito: Un refugio de biodiversidad

El Parque Nacional Pico Bonito, declarado como tal en 1987, alberga una gran diversidad de ecosistemas que incluyen selvas tropicales, bosques nubosos, y ríos cristalinos. Este parque es hogar de más de 400 especies de aves y diversas especies de mamíferos, además de contar con montañas que superan los 2,400 metros sobre el nivel del mar. Su riqueza ecológica lo convierte en un área de vital importancia para la conservación ambiental.

La reciente operación de erradicación en el Parque Nacional Pico Bonito se enmarca en un contexto de creciente preocupación, tras una operación similar en la Biósfera del Río Plátano, donde se eliminaron 90,000 arbustos de coca.

Estos incidentes revelan un aumento en las actividades ilícitas de grupos criminales dentro de zonas protegidas, lo que podría tener consecuencias devastadoras tanto para el medio ambiente como para las comunidades locales.