Los padres de la víctima, José Javier Lagos y Yadira Elizabeth Mejía, enfrentaron problemas económicos y decidieron solventarlos vendiendo a su hija en múltiples ocasiones con fines sexuales. Aunque los detalles de la menor se mantienen en reserva para su protección, resulta increíble que esta haya sido la justificación que presentaron para permitir que su hija fuera violada. No contentos con esto, entregaron a la niña para ser explotada sexualmente por sus padrinos.

Cuatro adultos fueron capturados el pasado 22 de noviembre en San Pedro Sula. Durante el interrogatorio, ninguno de ellos negó las acusaciones. La denuncia fue interpuesta por una persona que permanece en el anonimato. Los fiscales lograron comprobar que los padres incluso intentaron negociar una vivienda a cambio de su hija.

El Juzgado de Letras de lo Penal de San Pedro Sula dictó una sentencia en audiencia de procedimiento abreviado. Se impuso a Luis Fernando Rosales una pena de nueve años y nueve meses de reclusión por el delito de violación agravada, mientras que Yadira Elizabeth Menjívar, José Javier Lagos Arita y Marlen Yolanda Reyes recibieron una pena de seis años por explotación sexual de menores.