Tocoa.- En la noche del 14 de septiembre, una tragedia se abatió sobre la comunidad de Tocoa con el asesinato de Juan López, un ferviente defensor del río Guapinol, regidor de la alcaldía y concejal por el Partido Libertad y Refundación (Libre). A la edad de 46 años, López fue interceptado por dos sicarios mientras se dirigía en su vehículo por una calle de tierra en la colonia Fabio Ochoa, justo después de salir de una iglesia. Los atacantes le dispararon en múltiples ocasiones, acabando con su vida en el asiento del conductor.

Juan López hacía unos días había pedido la renuncia de Adán Fúnez como alcalde
de Tocoa y del Partido Libre, luego del video donde aparece negociando sobornos
con los Cachiros y otros narcotraficantes. “El alcalde ya no reúne el mínimo caudal
moral para que el partido lo siga manteniendo en sus filas”, dijo Juan López.

Medidas de protección

Desde hacía tiempo, Juan López había sido objeto de constantes amenazas, lo que llevó a que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) le otorgara medidas cautelares para su protección. Sin embargo, a pesar de su estatus como beneficiario del Sistema Nacional de Protección, las medidas adoptadas por el Estado de Honduras resultaron insuficientes para salvaguardar su vida.

Demandas de justicia

El asesinato de Juan López generó un clamor de justicia que resuena en todo el país. La iglesia Católica, el Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (Copinh), la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Oacnudh) y el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos en Honduras (Conadeh) han exigido a las autoridades una investigación seria que esclarezca este crimen.

La presidenta Xiomara Castro, su esposo el expresidente Manuel Zelaya y otros líderes del Partido Libre también han condenado el asesinato. «Exigimos justicia para Juan, quien fue asesinado por su labor en defensa del río Guapinol. El Estado y el gobierno de Xiomara Castro son responsables de este nuevo asesinato», enfatizó el Copinh.

Responsabilidad de las autoridades

El sacerdote Carlos Orellana, asignado en Tocoa, ha responsabilizado directamente al alcalde Adán Fúnez y sus secuaces por la muerte de López, calificándolo como un acto cobarde. Días antes de su asesinato, López había solicitado la renuncia de Fúnez tras la difusión de un video en el que se le veía negociando sobornos con los Cachiros y otros narcotraficantes, argumentando que «ya no reúne el mínimo caudal moral para que el partido lo siga manteniendo en sus filas».

Investigación en curso

Ante la gravedad del crimen, se ha conformado un equipo interdisciplinario que incluirá miembros de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI), la Dirección de Inteligencia Policial (Dipol) y la Dirección Policial Antimaras y Pandillas contra el Crimen Organizado (Dipampco). Este equipo será responsable de recolectar evidencias, analizar la escena del crimen y obtener indicios que permitan esclarecer el asesinato de Juan López.

El clamor por justicia se alza, y la esperanza es que la verdad salga a la luz y que se haga justicia por la vida de este valiente defensor del medio ambiente.