Arnaldo Urbina Soto, exalcalde de Yoro, enfrenta una condena de 20 años en una cárcel estadounidense. La Fiscalía de Nueva York lo acusa de conspirar para importar miles de kilogramos de cocaína a Estados Unidos, en complicidad con el cártel de Los Cachiros. La gravedad del caso no radica solo en la cantidad de droga traficada, sino en cómo Urbina utilizó su cargo político para facilitar estas operaciones.
Desde la alcaldía, Urbina permitió el uso de pistas de aterrizaje para el narcotráfico y garantizó la impunidad de los traficantes. Su relación con figuras de poder como el expresidente Juan Orlando Hernández, condenado a 45 años, fue clave en este esquema. El daño causado por toneladas de cocaína es incalculable, señala la Fiscalía, que pide una sentencia ejemplar para disuadir a otros políticos tentados por el poder y el dinero fácil.
Urbina no solo buscaba influencia política, sino también acumular riqueza a través de sus alianzas con narcotraficantes. Aunque pidió que se considere el tiempo que pasó en prisión en Honduras, la Fiscalía no presentó pruebas para reducir su sentencia. Además, la Oficina de Prisiones será quien decida si se le otorgan créditos por el tiempo que estuvo bajo custodia mientras esperaba su extradición.
El 18 de septiembre de 2024, el juez Denise L. Cote dictará la sentencia. La condena no solo marcará el destino de Urbina, sino también enviará un mensaje claro: el abuso del poder público tendrá graves consecuencias.|
Pavel Aguirre 
Fernando